¿Cómo se aplica?

• Se establece un plan nutricional individualizado para cada paciente, en el que se reparte el aporte de las calorías a lo largo del día para fraccionarlo y adaptarlo a lo que los ritmos biológicos requieren,
• Tiene sus pilares fundamentales en:
  • el aporte de ciertos vegetales en cantidades ilimitadas, y de otros en cantidad controlada
  • la disminución inicial de los aportes de hidratos de carbono y grasas de modo controlado e individualizado
  • el aporte normoproteico de proteínas (es decir, se ingieren los gramos de proteína por kilo de peso que necesita cada paciente al día, no más pero tampoco menos), a expensas de proteínas purificadas de alto valor biológico en forma de productos proteicos de gran variedad en sabores, texturas y formatos, combinados o no con proteínas alimentarias en función de cada caso. El objetivo es intentar preservar la masa muscular para mantener el metabolismo, y que se consuman así esencialmente los depósitos de grasa sobrante
  • la suplementación individualizada en ciertos micronutrientes (vitaminas, minerales, omegas, etc.), para garantizar que, durante todo el transcurso del programa, el organismo tiene una cantidad óptima de todos ellos (en ocasiones ya disminuidos previamente)
  • la ingesta de agua y líquidos abundante y suficiente cada día
  • una atención especial al estado del aparato digestivo del paciente, desde la calidad de sus digestiones al estado de la mucosa y flora del intestino, aspectos esenciales todos ellos para que los resultados obtenidos puedan mantenerse
  • la práctica de actividad física adaptada a cada persona y regular desde el inicio
  • un trabajo de reeducación nutricional y de hábitos desde el inicio
• En este tipo de programas prestamos una atención especial al estado nutricional del cerebro, ya que si existen inadecuados niveles de ciertos neuromediadores, estos desequilibrios deben ser corregidos o difícilmente los resultados podrán mantenerse. Dichas moléculas del cerebro juegan un rol esencial en la regulación de gran cantidad de procesos de la actividad cerebral: el humor y optimismo, la fuerza de voluntad y motivación, el estrés y la dificultad para «desconectar» del trabajo, los comportamientos alimentarios (compulsiones por la tarde o noche hacia dulces, hidratos, chocolate…), o el sueño
• Este abordaje, junto con las especificidades metabólicas de este programa nutricional, posibilitan que el proceso transcurra con un control del óptimo del apetito y un buen estado de ánimo y físico
• Desde el inicio, el programa sigue los principios de la Cronobiología Nutricional o Ritmonutrición, que es la ciencia que estudia cómo el momento del día en que comamos cada tipo de alimentos influye en que los ritmos biológicos del organismo funcionen adecuadamente o no. Esto es fundamental no sólo en el adecuado transcurso del programa, sino en el proceso de reeducación nutricional y mantenimiento.

Posibles efectos adversos

• Como cualquier otro, este programa nutricional debe estar supervisado por un médico formado, ya que debe garantizar el aporte de todos los nutrientes necesarios para el organismo el buen funcionamiento tanto físico como mental del paciente
• Si se siguen las instrucciones médicas adecuadamente, los efectos adversos que pueden aparecer son mínimos y perfectamente corregibles por un médico formado
• Como cualquier otro, exige un trabajo de modificación de hábitos para que los resultados se mantengan, tanto en lo referente a los hábitos alimenticios saludables, como a la actividad física regular, además del manejo del estrés y gestión adecuada del sueño, y reparación del ecosistema intestinal si es necesario. Pero esto no es un efecto adverso de la dieta sino el objetivo que persigue este programa nutricional.

¿Para quién está indicado?

• Para aquellas personas que precisan un reequilibrio en su peso y hábitos, una vez que desde el punto de vista médico se han descartado contraindicaciones y adaptado el programa al caso individual
• En el caso concreto del manejo del paciente con exceso de grasa, el programa permite el manejo tanto de pacientes con gran sobrepeso u obesidad, como el de pacientes que sólo precisan un programa de esculturización
• Una de las ventajas de la buena preservación de la masa muscular (que pesa mucho más que la grasa), es que se pierde aún más rápidamente el volumen que el peso (la grasa es como las palomitas de maíz: abulta mucho y pesa poco).

Pide tu cita aquí para adaptarnos a tus objetivos y necesidades.