LIFTERAL® BICHECTOMIA

¿Qué es y para que sirve?

Literalmente, el término “bichectomía” quiere decir “eliminación de las bolas de Bichat”.

Las bolas adiposas de Bichat son dos pequeñas bolsas de grasa (alrededor de 10 cc de volumen y unos 9 g de peso), situadas en la región inferior de la mejilla. Cuando son de un tamaño mayor pueden suponer un complejo estético para ciertas personas ya que, al hallarse entre la mejilla y el tercio inferior del rostro, pueden dar la sensación al rostro como de engrosado, pesado, demasiado redondeado o poco armónico.

Habitualmente este inestetismo se solía corregir mediante cirugía (bichectomía quirúrgica), aunque ahora, gracias a Liftera®, ya no es necesario recurrir a ella.

Liftera® es un tratamiento no invasivo de estiramiento y definición del contorno de ciertas áreas corporales mediante el empleo de un vanguardista tipo de tecnología HIFU (iniciales en inglés de “ultrasonidos focalizados de alta intensidad).

Esta tecnología se utiliza desde hace muchos años en Medicina (ecografías, destrucción de cálculos renales, de ciertos tumores sin cirugía, etc.). Se sirve de diferentes frecuencias acústicas para concentrar toda la vibración que producen dichos sonidos “especiales” (ultrasonidos) en un punto determinado dentro o debajo de la piel, a una profundidad que se puede elegir cambiando de aplicador, para poder actuar sólo en los planos necesarios (fascias o músculos superficiales, grasa, dermis, epidermis…). La vibración del ultrasonido produce calor en un punto, lo que se traduce en una microcoagulación de ese tejido (en este caso, nos interesa destruir parte de esta grasa, además de formar de nuevo colágeno para mejorar la calidad de la piel a ese nivel).

La tecnología HIFU de Liftera® es innovadora respecto a los tratamientos HIFU convencionales, ya que:

  • Es versátil, ya que cuenta con 2 tipos de aplicadores: los aplicadores Liftera® lineares, clásicos de todo HIFU (los disparos salen en ráfaga uno detrás de otro), y los aplicadores

Liftera® exclusivos de lápiz, dotado de un diseño ergonómico, que permiten depósitos puntuales de energía en zonas muy precisas y pequeñas con una precisión milimétrica. Esto es esencial porque la anatomía corporal no es plana, y de este modo permiten tratar zonas curvas, respetando la anatomía individual y permitiendo adaptar el tratamiento a las necesidades de cada paciente.

  • La casi totalidad de equipos HIFU son analógicos (emiten varios sonidos, aparte del ultrasonido que deseamos utilizar para calentar puntos a una profundidad determinada, calentando muchos puntos en el camino desde la superficie de la piel, por lo que son bastante dolorosos), mientras que Liftera® es un sistema que digitaliza los ultrasonidos (emite un sonido puro, sin armónicos o distorsiones, y calienta específicamente sólo a la profundidad que decidimos, por lo que la probabilidad de que el tratamiento resulte doloroso es mucho menor. Sólo Liftera® asocia las tecnologías UDP™ (Unidad Digital de Potencia) y TDT™ (Tratamiento de Difusión Térmica), que unidas multiplican la eficacia y seguridad de los tratamientos HIFU, permitiendo entregar energía térmica a la piel de una manera más efectiva y segura, fortaleciendo las diferentes capas y favoreciendo su tensado de la piel y remodelación del contorno. 

¿Cómo se aplica?

  • Realizar un tratamiento personalizado requiere emplear sesiones, separadas de al menos 2 meses entre ellas. El estudio individualizado de cada caso permitirá establecer el protocolo más adecuado.
  • Cada sesión dura unos 30 minutos.

¿Qué áreas se pueden tratar?

  • Grasa adiposa de Bichat
  • La piel situada sobre ella

¿Qué resultados voy a obtener?

  • Esta tecnología HIFU de última generación aborda en la misma sesión de modo secuencial:
    • La disminución de la grasa adiposa de Bichat sin caer en el exceso, para no ocasionar un vaciamiento excesivo a este nivel (algo relativamente frecuente con el tratamiento quirúrgico que después exige tratamientos de relleno complementarios).
    • La pérdida de densidad por disminución del colágeno de la piel de estas áreas.
    • Las causas de la flacidez y descolgamiento de los tejidos a este nivel.
    • Cuando es preciso, la disminución de la tonicidad de ciertos músculos o fascias superficiales a este nivel, en pacientes de mayor edad.
  • Por ello afina los contornos del rostro y marca y realza los pómulos.
  • Los efectos empiezan a percibirse a los 21 días, aunque en algunos caso puede ser antes o un poco después.

Posibles efectos adversos

  • En general, al realizarse la sesión, lxs pacientes apenas refieren molestias, notan como un “golpeteo”, aunque algunos de los aplicadores necesarios para ciertas profundidades de acción pueden provocar una molestia transitoria o sensación de quemazón perfectamente tolerable, que no requiere del empleo de anestesia. El resto son completamente indoloros. Éste es un diferencial importantísimo, ya que otras tecnologías HIFU pueden ser muy dolorosas.
  • Puede aparecer un leve enrojecimiento, irritación o entumecimiento (sensación de agujetas en los músculos del rostro) de la zona tratada durante unas horas, aunque no es lo habitual: no son de esperar efectos adversos más importantes ni definitivos.
  • No se requiere ninguna precaución especial tras la sesión, que de modo inmediato pasa completamente inadvertida para el entorno.

¿Para quién está indicado?

Para todas aquellas personas que quieran combatir de manera visible, dinámica y sin inyecciones ni cirugía la falta de definición de las mejillas y pómulos.

Pide tu cita aquí para adaptarnos a tus objetivos y necesidades.