¿Qué es y para que sirve?
- El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es un tratamiento personalizado de para la regeneración de ciertos tejidos
- Aporta Factores de Crecimiento, unas proteínas que contienen las plaquetas, cuyas cualidades regenerativas estimulan las células consiguiendo una regeneración de los tejidos a los que pertenecen dichas células. Desencadenan el mecanismo de cicatrización del tejido conectivo y el de regeneración y reparación de los huesos. Además estimulan la formación de nuevos vasos sanguíneos, estimulando así la cicatrización de las heridas
- Estos factores se obtienen a partir de la propia sangre del paciente, extraída en circuito cerrado. El producto final es un concentrado regenerador que se encuentra libre de células, es estéril y apirógeno. Dicho producto es inyectado en la zona a tratar mediante microagujas.
¿Cómo se aplica?
- Nº de sesiones: se suelen realizar 3 sesiones, con 2 semanas de intervalo entre ellas
- Duración aproximada de 30-45 minutos.
¿Qué resultados voy a obtener?
Este tratamiento regenerativo puede combatir de modo eficaz los principales síntomas que la degeneración del tejido afectado puede provocar y puede ayudar a detener el proceso o a enlentecerlo.
Posibles efectos adversos
- Los factores de crecimiento procedentes del PRP no tienen efectos adversos importantes ya que se obtienen de la propia sangre de los pacientes
- Puede haber un enrojecimiento de la zona inyectada y alguna molestia pasajera que normalmente desparece espontáneamente, por lo que se suele recomendar hacer reposo relativo y no realizar grandes esfuerzos en las horas posteriores al tratamiento.
¿Para quién está indicado?
- Los factores de crecimiento contenidos en las plaquetas pueden ayudar a acelerar los procesos naturales de cicatrización, regeneración y curación en cualquier tejido como la piel (úlceras, quemaduras, cicatrices), los tendones (tendinitis), el cartílago (artrosis) y el hueso (roturas, fisuras).
- En los 14 años que hace utilizamos esta técnica, nos ha mostrado su utilidad en el tratamiento de:
- Lesiones del cartílago de las articulaciones: artrosis de cadera, rodilla, tobillo, muñeca, hombro, etc.
- Lesiones de los tendones: tendinitis en codo, muñeca, hombro, etc.
- Cualquier inflamación de origen degenerativo o traumático.